¿Cómo detectar si mi hijo podría tener un Síndrome de Mala eliminación?
- Orina con muy poca frecuencia. No orina al levantarse.
- Corta el chorro de orina o su chorro es débil.
- Tiene urgencia miccional (deseo imperioso y urgente de orinar). Se sienta sobre los talones.
- Presenta esfuerzo para iniciar la micción. Se aprieta el abdomen para iniciarlo.
- Tiene escapes diurnos de orina (moja unas gotas, la ropa interior, todo el pantalón).
- Tiene constipación (evacuar el intestino menos de 3 veces por semana o deposiciones cuprinas) o encopresis (escapes de materia fecal).
¿Por qué es importante detectar y tratar este Síndrome?
Porque produce muchas alteraciones en la eliminación de orina y materia fecal y predispone a presentar infección urinaria.
¿Es normal que a mi hijo se le escape un poco de orina durante el
día porque aguanta por jugar?
Si bien es frecuente que esto ocurra
debemos evitarlo.
Cuando la vejiga se llena se produce el deseo de orinar. La vejiga se contrae y se abre un esfínter que se llama externo y se produce la micción.
Si el niño sigue jugando y no va al baño, la vejiga aumenta su capacidad y retiene la orina un tiempo más. Al tiempo nuevamente se contrae y si el esfínter no se abre voluntariamente (el niño no va al baño) el proceso se inicia de todos modos y se escapa la orina.
¿Cómo lograr una micción adecuada?
- Evitar micciones muy espaciadas (orinar cada 3 horas aproximadamente
durante el día).
- No aguantar.
- Evaluar si el niño puede utilizar el baño adecuadamente.
- Asegurar que el niño pueda apoyar ambos pies en el piso.
- Asegurar un vaciamiento vesical completo.
¿Por qué la constipación tiene que ver con el vaciado de la vejiga?
El mecanismo funciona del siguiente modo:
La retención de la materia fecal disminuye la capacidad funcional de la vejiga. Esto genera un deseo miccional temprano, produciendo un espasmo del piso pelviano e impidiendo la completa relajación durante la micción que dificulta el vaciado completo de la vejiga.
Escala de evacuación
¿Cómo se trata el Síndrome de mala eliminación?
El diagnóstico y tratamiento está exclusivamente a cargo del pediatra y/o especialistas en el tema y se basa en fomentar hábitos miccionales y hábitos defecatorios adecuados.
En algunos casos requiere tratamientos específicos que serán indicados en el consultorio médico.