Importancia, Prevención y Seguimiento del Síndrome Uremico Hemolítico
El Síndrome Urémico Hemolítico (SUH) es una enfermedad grave que afecta principalmente a los niños, siendo una de las causas más frecuentes de insuficiencia renal aguda en esta población en la Argentina. Es más frecuente en niños menores de 5 años, aunque puede presentarse durante toda la infancia. En Argentina, se celebra el Día Nacional de la lucha contra el Síndrome Urémico Hemolítico cada 19 de agosto, una fecha destinada a concientizar sobre la importancia de la prevención y el control de esta enfermedad.
Este año, la Sociedad Argentina de Pediatría ha decidido extender la conmemoración de este día a una semana completa de actividades y campañas informativas, jerarquizando la prevención y el seguimiento con controles periódicos.
¿Qué es el Síndrome Urémico Hemolítico?
El SUH es una condición médica severa caracterizada por la siguiente tríada:
- Anemia hemolítica microangiopática: se rompen los glóbulos rojos dentro de los vasos.
- Trombocitopenia: hay una disminución en el número de plaquetas en la sangre.
- Daño renal agudo: el daño renal puede incluir desde pérdida de glóbulos rojos por la orina hasta la menor producción de orina, con necesidad de diálisis para reemplazar la función renal.
La principal causa en los niños es la infección por la bacteria Escherichia coli productora de toxina Shiga (STEC), que suele adquirirse a través del consumo de alimentos contaminados, especialmente carne vacuna mal cocida, productos lácteos no pasteurizados y agua contaminada.
¿Cómo se transmite?
Se contrae al consumir agua o alimentos contaminados y/o mal cocidos; en especial, la carne.
La bacteria puede ingresar al organismo a través de:
¿Cuáles son sus síntomas?
Generalmente empieza con diarrea con sangre, dolor abdominal y vómitos. El paciente también puede presentar palidez, alteración de la conciencia, disminución en la eliminación de orina, convulsiones y otros síntomas.
Siempre acudir al pediatra o a un centro de salud si el niño /niña tiene estos síntomas. Evitar la automedicación.
¿Cómo se trata?
No hay tratamiento específico para la enfermedad. Se tratan los síntomas y el compromiso de los órganos afectados. Si llega a producirse una insuficiencia renal aguda, se indica diálisis.
Importancia del seguimiento
Los niños que tuvieron SUH en la infancia pueden presentar complicaciones a largo plazo como hipertensión, proteinuria (pérdida de proteínas por orina) y disminución de la función renal, lo cual puede requerir diálisis o trasplante renal en casos severos. Es importante destacar que estas complicaciones a veces pueden manifestarse años después del episodio inicial y la enfermedad o daño renal NO produce síntomas. Por esta razón, es fundamental realizar controles regulares con un nefrólogo pediátrico para monitorear la salud renal hasta la adultez y poder actuar preventivamente ante cualquier signo de deterioro.
Cuidados y Medidas de Prevención
El SUH una vez instaurado no tiene tratamiento específico, por lo tanto, la prevención del SUH es fundamental y puede lograrse mediante una combinación de medidas de higiene alimentaria y prácticas seguras en la preparación de alimentos y de la vida cotidiana. Algunas de las recomendaciones claves incluyen:
¡Todas estas medidas también previenen muchas enfermedades!
Bibliografía
Boletín del Ministerio de Salud. https://www.argentina.gob.ar/sites/default/files/2024/04/ben-702_se17.pdf
Alconcher, L. F., Lucarelli, L. I., Bronfen, S., & Villarreal, F. (2024). Kidney sequelae in 281 Shiga toxin–producing Escherichia coli-hemolytic uremic syndrome patients after a median follow-up of 12 years. Pediatric Nephrology, 39(1221–1228). https://doi.org/10.1007/s00467-023-06183-7
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