Grupo de Trabajo: Uso indebido de drogas
Alcohol y bebida energizante, un cóctel explosivo entre los jóvenes
Para el investigador en epidemiología psiquiátrica del Conicet, Hugo Míguez, "las energizantes son sólo el principio para la adicción a otras sustancias". El riesgo no sólo reside en su toxicidad farmacológica (combinadas con alcohol o con anfetaminas pueden afectar el sistema cardiovascular) sino en la toxicidad del estilo de vida que les están imponiendo a los adolescentes y los jóvenes. "Implican una propuesta de aceleración, descontrol y rendimientos anormales, que está impulsada por un mercado de adultos que buscan lucro", destacó. con un agregado de incremento de hechos de violencia.
La primera bebida energizante que llegó al país fue de origen austríaco y empezó a venderse en 2001. Ahora, ya hay 10 registradas en el Instituto Nacional de Alimentos, que las encuadra como suplementos dietarios.
Cuestan más de 3 pesos en quioscos y unos 12 pesos en boliches. Contienen minerales, aminoácidos y carbohidratos, entre otros ingredientes. La taurina (presente en nuestro organismo, disminuye por situaciones de estrés o cansancio, por lo cual es necesario restituirla.), la vitamina B6 y la cafeína, actúan como estimulantes. La cafeína es lo que más preocupa. Hay aproximadamente 35 miligramos de cafeína por cada 100 mililitros de bebida energizante.
La máxima concentración en la sangre de cafeína se alcanza entre los 30 y 45 minutos de haberla ingerido. A las tres horas ya se ha eliminado la mitad de lo que se ha absorbido y su efecto perece desaparecer. Esta rápida eliminación produce deshidratación.
El consumo de las energizantes genera polémica. Sus fabricantes no concuerdan. "No tienen efectos adversos y neutralizan la borrachera", dijo la presidente de la empresa nacional que fabrica una bebida energizante, que pasó de vender 20.000 energizantes por mes el año pasado a 300.000 este año.
Los adolescentes dicen que las toman para lograr que el cuerpo aguante durante muchas horas de baile. O para no sentir la "resaca" del alcohol, y hasta para pasar la noche estudiando. Los deportistas y los concurrentes a los gimnasios, para aumentar el rendimiento. Lo cierto es muchos jóvenes ya están consumiendo en nuestro país 10 marcas de bebidas energizantes, que contienen cafeína y son de venta libre en quioscos, bares y discos.
Pero funcionarios públicos de las áreas de prevención de la drogadicción y la comunidad médica muestran preocupación: tomar esas bebidas en combinación con alcohol sería riesgoso.Cuando se mezcla, las energizantes retardan el efecto depresor del alcohol.
Los chicos terminan así consumiendo más alcohol.
Para Osvaldo Curci, profesor titular de Toxicología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires, la mezcla de bebidas energizantes con alcohol es una amenaza para el organismo. Puede desencadenar acidez, insomnio, hipertensión, hipoglucemia, convulsiones, arritmias u otros males cardíacos y hasta muerte súbita.
Curci resaltó también que se produce un efecto psicológico: "Como se publicita que esas bebidas evitan el cansancio, los consumidores creen en esa "ventaja", pero no significa que realmente los productos generan ese efecto".
Se anuncian como bebida ideal para recuperar los niveles de energía, prevenir el agotamiento mental, mejorar la capacidad de concentración, y aumentar la atención y la reacción. ¿Quién puede tomarla? Según consta en el sitio oficial de Internet, el target es "el deportista, el conductor, el ejecutivo y el estudiante". Su slogan es sencillo pero efectivo: "Viví tu vida a full".
Grupo Uso Iindebido de Drogas
Sociedad Argentina de Pediatría