El 21 de noviembre se conmemora el día de la Enfermería Argentina, la celebración tiene como hito la fundación de la Federación de Asociaciones de Profesionales Católicas de Enfermería y en coincidencia con la festividad de Nuestra Señora Virgen de los Remedios, considerada patrona de la actividad.
En nuestro país, las primeras universidades en incluir la enfermería como carrera fueron la Universidad del Litoral, que en 1939 creo la Escuela de Nurses, y la Universidad Nacional de Tucumán, que en 1952 abrió la escuela de Enfermería. La conmemoración anual de la efeméride brinda la oportunidad para que las organizaciones: universitarias, técnicas, asociaciones y sociedades científicas, permitan compartir y dar a conocer los cambios sustanciales de la profesión de enfermería, y su aporte en el impacto de las políticas sociosanitarias en los ámbitos públicos y privados.
Cada año, se multiplican los avances en las distintas dimensiones que engloban los cuidados que brinda esta disciplina científica y que se enmarca en el seno de las ciencias de la salud. Estas dimensiones incluyen las responsabilidades, las funciones, los roles y las habilidades que requieren un cuerpo específico de conocimiento. Las dimensiones se manifiestan a través de las características de la práctica de enfermería profesional por medio de las funciones de su rol en el cuidado directo o indirecto del paciente en los distintos niveles de atención de la salud. Estas funciones de su rol incluyen las de practicante clínica experta, educadora, consultora, investigadora y administradora/líder. La investigación en enfermería, resulta fundamental para validar y generar conocimientos sobre educación, administración, gestión y cuidados seguros basados en evidencia de alta calidad. A través de la investigación, los profesionales de enfermería pueden desarrollar y perfeccionar los mejores métodos para prestar educación, haciendo uso de las tecnologías de la información y comunicación, y la simulación para mejorar el aprendizaje en la formación de grado y posgrado.
El impulso dado por las políticas de salud, en el desarrollo de programas académicos y de formación continua, ha posibilitado no sólo mejorar las competencias profesionales, sino que facilitó el reconocimiento de la necesidad de especialización del colectivo enfermero, dando respuesta a las necesidades de salud que requieren las personas, de los distintos grupos etarios.
La excelencia en el cuidado, es la práctica que supera el nivel de competencia y que en su último extremo contribuye al crecimiento de las especialidades y al avance del cuidado humanizado, centrado en las personas, que proporciona enfermería.
Desde el grupo de trabajo de enfermería de la Sociedad Argentina de Pediatría, queremos hacerles llegar nuestro más cálido saludo a todos/as las enfermeras/os que dondequiera que se encuentren desarrollando su labor y cuya constante dedicación proporcionan la fuerza y la dirección necesarias para el avance de la profesión.