El 9 de marzo se celebra el Día Mundial del Riñón, una campaña a nivel mundial destinada a concientizar sobre la importancia de nuestros riñones.

En esta fecha en todo el mundo se realizan actividades informativas para crear conciencia sobre la importancia de la salud renal, informar sobre conductas preventivas, conocer factores de riesgo y aprender cómo vivir con una enfermedad renal. 

El cuidado de pacientes con enfermedad renal crónica ( ERC) puede ser afectado significativamente ante eventos  inesperados. 

Los eventos desastrosos, ya sean locales (terremotos, inundaciones, guerras, clima extremo) o globales (la pandemia de COVID-19), afecta el funcionamiento y las condiciones de vida de la comunidad en su conjunto y en particular a poblaciones vulnerables.

Los pacientes con ERC   representan más de 850 millones de personas en todo el mundo,  y se ven particularmente afectados por estos eventos , en particular porque la accesibilidad a la atención de salud se ve comprometida.

El impacto de la COVID-19 en el sistema de salud ha supuesto una carga adicional para esta población vulnerable, que ha tenido que afrontar el riesgo de infectarse durante las visitas a los establecimientos de salud, o incluso la suspensión o cancelación de la atención no relacionada con la COVID-19 debido a  los límites de capacidad de los servicios de salud y a las políticas de confinamiento.

Los servicios de salud colapsaron y fue complejo poder brindar una adecuada atención a los pacientes con enfermedad renal progresiva, sobre todo los habitantes en zonas alejadas de centros urbanos.

Por lo tanto, la preparación para eventos inesperados es crucial   para los pacientes renales, tanto a través de la implementación de políticas de salud nacional, como de estrategias en nuestros lugares de trabajo para no permitir que en circunstancias adversas nuestros pacientes queden desprotegidos de la atención medica sanitaria.

        ¡Preparándonos para lo inesperado, apoyando a los vulnerables!

COMITÉ NACIONAL DE NEFROLOGÍA